Ha salido a la luz pública una obra que presenta la forma de gobernar en Venezuela durante los últimos tres lustros. El título del libro es Bumerán Chávez Los fraudes que llevaron al colapso de Venezuela. Ha sido escrito por el corresponsal el diario ABC de España en Washington, DC, Emili J. Blasco.

La narrativa de Blasco se nutre de testimonios de actores que han fungido como artífices de la acción y legado de Hugo Chávez. Así como también, de los documentos disponibles sobre la realidad política, económica y social de Venezuela en los centros de pensamiento en la ciudad de Washington.

En las 374 páginas del libro, Blasco presenta las líneas de acción de lo que se conoce como el socialismo del siglo XXI (SSXXI).

Un modelo contrapuesto a la democracia liberal, que ha logrado penetrar el modo de gobernar en Ecuador, Bolivia, Argentina, Nicaragua, y en algún modo Brasil y Uruguay. Países, en los cuales la gobernabilidad se basa en "...una visión, un método y una misión..." de la neo-dictadura constitucional, e "...informes de inteligencia sobre políticos, periodistas y militares...".

La legitimidad para perpetuarse en el poder los Gobiernos del SSXXI, la manifiestan de origen más no de ejercicio. De allí, el cambio de la arquitectura electoral en Venezuela. Cuando Chávez toma el poder en 1998, el proceso electoral era manual en el voto y la trasmisión del acta electoral vía electrónica. En el 2013, la última elección presidencial, el voto y la trasmisión del acta electoral fue automatizado.

Blasco relata en su libro lo que ocurrió el día de la última elección presidencial. "Maldita sea, ¿vamos a permitir que esta mierda de elecciones las gane este "marico" el coño de Capriles?", preguntó (Diosdado) Cabello.(...) "Es cuando ese día se cayó el sistema de internet. Al poco salió en público Arreaza anunciando que había habido un problema con internet y que se estaba arreglando. Cuando se restituyó el servicio las pantallas de las computadoras comenzaron a revertir la situación: iban llegando más votos para Maduro".(...) "Al final de la noche, el CNE proclamó vencedor a Maduro por 223.599 votos: le atribuyó 7.587.579 (50,6 por ciento), frente a los 7.363.980 de Capriles (49.1 por ciento)".

Para este proceso electoral, el arquitecto Humberto Villalobos determinó con la data de todas las actas electorales (SUMATE) un anómalo pico de sufragios después de la hora oficial de cierre de los centros electorales, que induce a la hipótesis del manejo del dato (voto) electrónicamente a favor de la voluntad del oficialismo.

Hoy, la nueva forma de dictadura se encamina a la reelección indefinida de Rafael Correa en Ecuador; el oficialismo boliviano busca un proyecto de ley que permitiría la reelección indefinida del mandatario Evo Morales a través de un referendo; y Daniel Ortega logró la reforma de la constitución para la reelección indefinida. En Brasil la busca a través del proceso de votación que es totalmente automatizado.

En esta manera de gobernar -ad infinitum- la corrupción económica se profundiza. El Gobierno venezolano realizó una reingeniería financiera, en la cual la empresa petrolera estatal, Petróleos de Venezuela (PdVSA), es convertida en la entidad financiera para legitimar los capitales del narco-estado y costear las actividades de grupos terroristas como la FARC, Hezbolá y el Gobierno de Irán.

Blasco relata: "Durante su Gobierno (Chávez), Venezuela se convirtió en el punto de salida del 95 por ciento de la droga colombiana, en su viaje a Estados Unidos y Europa"... una "manera de platear una guerra asimétrica contra (Estados Unidos) Washington". Por ello, la participación de la cúpula de los poderes del Estado, desde el legislativito hasta militar.

En Brasil, los gobiernos de Lula y Dilma (12 años) han utilizado la empresa petrolera de Petrobras para la corrupción económica, que ha sido estimada en $31 mil millones. En Ecuador, las empresas no exportaron pero recibieron pagos de $54 millones desde Venezuela. En Panana, ha ocurrido el mismo formato.

Las nuevas élites del poder en los países del SSXXI utilizarían las estructuras del Estado, en unión a PdVSA, para blanquear los capitales provenientes de la corrupción económica y de actividades ilícitas. Las operaciones financieras conjuntas incluirían desde contratos fantasmas hasta el uso del mercado de capitales (bonos).

El libro de Blasco permite encontrar las causalidades que presentan los Gobiernos de la Región. Una relación costo-beneficio de cómplices, de compinches, con formas de gobernar autoritaria.

Una década de praxis común, entre los factores de poder de estos Gobiernos, ha creado las mejores prácticas totalitarias en las cuales la democracia liberal se diluye y sólo queda en la forma, más no en contenido.

El libro de Emili J. Blasco permite, "a los incrédulos. Todos, en algún momento, lo fuimos", explorar los hechos en Venezuela que han permitido forjar el devenir de las neo-dictaduras en Latinoamérica.

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